Inmunoterapia
La inmunoterapia, bioterapia, terapia biológica, terapia modificadora de la respuesta biológica o terapia MRB, en medicina, se refiere al conjunto de estrategias de tratamiento para estimular o reponer el sistema inmunitario frente al cáncer, infecciones u otras enfermedades así como para aminorar los efectos secundarios de tratamientos muy agresivos usados contra el cáncer. El objetivo puede ser profiláctico (preventivo) o terapéutico (curativo o de mantenimiento). Dentro de los tratamientos biológicos están los anticuerpos monoclonales, las vacunas y los denominados factores de crecimiento.1
Las moléculas activas implicadas en la inmunoterapia se denominan inmunomoduladores. La mayor parte son citoquinas y algunas de ellas, como por ejemplo el factor estimulante de colonias de granulocitos (G-CSF,Granulocyte colony-stimulating factor) o el interferón, ya están siendo usados en clínica. Otros tipos de citoquinas, como las interleuquinas 1,2,6,8 ó el factor de necrosis tumoral [TNF-α], se están utilizando en numerosos ensayos clínicos y otros estudios preliminares para un futuro uso en inmunoterapia.
Cáncer
La inmunoterapia del cáncer intenta estimular el sistema inmunitario para rechazar y destruir tumores. El primer caso de inmunoterapia en cáncer fue probablemente en 1890, cuando con la inyección de Streptococcus pyrogenes en un tumor se inducía su regresión. Sin embargo, no se habló de inmunoterapia contra el cáncer hasta casi 100 años más tarde, cuando Rosenberg publicó un artículo en el que se informaba de una baja tasa de remisión del tumor en 1205 pacientes con cáncer que fueron sometidos a diferentes tipos de inmunoterapia.2 El componente principal de la respuesta inmune es el TNF-α, entre otras citoquinas. Actualmente se están llevando a cabo numerosos estudios orientados al uso de la terapia génica para hacer que las células tumorales expresen distintos tipos de citoquinas. Hoy en día esta estrategia aún no es válida en clínica, pues no existe forma de transmitir los genes de interés directa y exclusivamente a las células tumorales.
Una técnica que ya es viable clínicamente es la inmunoterapia con BCG para la primera fase (no invasiva) del cáncer de vejiga utiliza la instilación de bacterias vivas atenuadas en la vejiga, y es eficaz en evitar la reaparición en hasta dos tercios de los casos. La inmunoterapia tópica utiliza una crema de mejora inmunitaria (imiquimod) que es un productor de interferón que hace que las propias células T asesinas de los pacientes destruyan las verrugas, las queratosas actínicas, el cáncer de célula basal, el cáncer de célula escamosa, el linfoma cutáneo y el melanoma maligno superficial. La inmunoterapia con inyección usa inyecciones de antígenos de paperas, candida o tricofitina para tratar las verrugas (tumores inducidos por el HPV).
me parece que es muy bueno por que puedes prevenir y ser mas concientes con lo que cogemos o comemos por que algunas de esas cosas pueden tener muchas bacterias, infecciones o enfermedades.
ResponderEliminarjazmin rodriguez 7-1