viernes, julio 25, 2014

Trabajo/Nury Polanco/8-1

Respiracion celular de las mitocondrias
 Intercambio Gaseoso Pulmonar







Las aves marinas el el consumo de agua salada
Así pues, la cuestión es cómo se las arreglan las aves marinas, -gaviotas o cormoranes, por ejemplo-, para eliminar el exceso de sal que ingieren al beber. Y la respuesta a esa cuestión es que lo hacen recurriendo a un mecanismo basado en el transporte activo de sales. El mecanismo consiste en transportar iones desde la sangre a la luz de un tubo o una glándula, como en este caso; ese transporte no se produce por difusión pasiva, sino que es necesario gastar energía (ATP) para producir el trasvase; por eso lo llamamos transporte activo. Normalmente, los iones transportados arrastran algo de agua, y por esa razón, en el tubo o en la glándula surge un líquido, que puede llegar a tener una alta concentración de sales. Todas las aves marinas tienen un par de glándulas de sal –también llamadas glándulas nasales-, que funcionan de ese modo. En la mayor parte de los casos, esas glándulas se encuentran en unos pequeños huecos del cráneo situados en la parte superior de las cavidades oculares, y para poder expulsar el fluido con las sales que hay que eliminar, un tubo conecta las glándulas con los orificios nasales. En todos los casos, el fluido es muy rico en iones sodio y cloruro, y su concentración osmótica es siempre muy alta.
Al revés que los riñones, las glándulas de sal no trabajan de forma permanente; solo lo hacen en situaciones de estrés osmótico, o sea, cuando es necesario eliminar un exceso de sales. Las aves terrestres también tienen glándulas nasales, aunque son muy pequeñas, pues prácticamente no desarrollan actividad alguna. De hecho, si se ven obligadas a ingerir a menudo alimentos con alto contenido en sales o a beber líquidos salados, el tamaño de las glándulas de sal aumenta, llegando a hacerse mayor de lo normal.
No obstante lo anterior, también hay importantes diferencias asociadas al modo de vida y hábitos alimenticios de las aves en cuestión. Las glándulas nasales del cormorán, al ser un ave costera que se alimenta de peces, producen un líquido cuya concentración es 500-600 mM, una concentración bastante baja. Las gaviotas argénteas, que consumen más invertebrados y que, por ello, ingieren más sales, producen un líquido con una concentración de 600-800 mM. Y el petrel, al ser un ave eminentemente oceánica que se alimenta principalmente de crustáceos planctónicos, produce un secreción nasal que puede alcanzar una concentración de 1.100 mM.
Comparacion en el sistema de excreción en los animales





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